domingo, 24 de marzo de 2013

EL PUZZLE DE LA VIDA






Si comparamos un puzzle con nuestra vida encontraremos muchas semejanzas, ahí van algunas...

1º. En la vida, te encuentras con muchas etapas. Algunas, hay que pasarlas,  otras hay que intentar  superar, y otras vienen y van,  acorde con la forma de enfretarnos a ellas. Problemas, alegrías, tristezas y un sinfin de obstáculos, que hay que vencer, serán , los  que marquen  nuestro paso por la vida.

1º. En un puzzle, nos encontramos con muchas piezas. Lo vamos montando poco a poco, pero puede ocurrir que  nos equivoquemos de pieza,  entonces, nos paramos y probamos con  otra ..y así sucesivamente. Algunas veces, nos puede dar  la sensación de que no vamos a  poder terminarlo nunca porque son demasiadas y parecen todas iguales, pero con  constancia y  ganas... se terminan todos los puzzles del mundo.


2º. La vida es un reto, pero hay personas que se acomodan a un estilo y forma de vida y  son incapaces de cambiar  aunque  no les satisface del todo la que están llevando, creen, que ser feliz es aceptar todo lo que te viene encima. No tienen motivaciones suficientes para salir de un círculo  que han ido formando sin darse cuenta,  y viven sólo para que la vida pase, sin implicarse mucho en ella.

2º. El puzzle es otro reto. Hay personas, que ponen piezas equivocadas en varias partes del puzzle y aún sabiendo que están mal puestas y que jamás encajarán con otras que posteriormente se pongan,  no ponen remedio y las dejan. Para esas personas,  lo más cómodo es ir poniendo piezas para terminarlo  pronto,  les da igual como terminar el puzzle. Para ellos, es suficiente con acabarlo.


3º. La vida da muchas vueltas, y si cada uno tiene muy claro lo que espera de ella se enfrentará  mejor a todas las visicitudes que pueda  encontrar. Cada persona tiene que tener claro  qué espera, qué puede ofrecer, qué limites cruzar o no, en qué arriesgar, qué valorar,  y sobretodo hacer siempre lo que uno crea que es conveniente para sí mismo, sin pensar en el qué dirán, y huyendo de normas y estupilaciones.

3º El puzzle da muchas vueltas hasta que se consigue terminarlo. Son demasiadas piezas y muy parecidas unas de otras , pero cada uno buscará una motivación para acabar y que quede completo. Para algunos supondrá mucho esfuerzo el tener casi que volver a empezar cuando se ha dado cuenta de que algunas están mal puestas , que en un principio parecían que encajaban pero no era así. Si uno quiere acabarlo bien, no importa confundirse todas las veces que haga falta.

4º. Vivir la vida...en definitiva, de eso se trata. Que cada uno elija cómo vivirla, pero, por favor...  que nadie se olvide de ser feliz.

4º. Terminar el puzzle. Algunas veces, queda la última pieza por poner, porque se ha perdido o por cualquier otra razón, pero hay que buscar soluciones o piezas sustitutivas para acabarlo, porque será la última pieza  que se ponga  la clave para ser feliz.


lunes, 11 de marzo de 2013

MI FANTASMA FAVORITO








Querido fantasma de la fábrica de la salsa Perrins:

Vives en Worcester desde el 1 de enero de 1823,  son muchos años los que llevas encerrado en esa habitación en la cual  has visto pasar, día tras día y  durante siglos, a miles de incrédulos visitantes  que no ven en ella más allá de un simple espacio vacío.   Me contaron hace mucho, que algunos de los que contemplaban perplejos aquel habitáculo triste y desolado llegaban a presentir  fugazmente la existencia  de un espíritu que, por supuesto, ni era santo, ni burlón, y ni siquiera tenía algo de deportivo.
Aquel, era el espíritu de  un fantasma un tanto peculiar, vamos, el que todo el mundo querría tener o acoger  en su casa.


Querido fantasma,  te escribo para pedirte un favor. Me gustaría que durante una temporada te trasladaras a vivir a mi casa. No estoy  necesitada de sustos, ni de  sesiones de ouija con presencias  reales, lo mío va más allá, es como si fuera un experimento, quiero saber, entre otras cosas, qué se siente al convivir con alguien, que en realidad, no existe.

Querido fantasma, no te asustes, no me he vuelto loca,  mi propósito es muy simple. Me gustaría  comprobar que la soledad se puede sobrellevar mejor si tienes alguien con quien compartir conversaciones, inquietudes, alegrías, penas, confidencias, discusiones y un sinfín de momentos… aunque ése alguien no esté físicamente en tu mismo espacio ni  en tu misma dimensión. Quiero saber, qué clase de vínculo se puede crear  cuando convives con alguien que sabes que está… pero no está.

 
Querido fantasma, quiero autoconvencerme de que idealizar a una persona nos es tan malo como dicen,  siempre hay que ser consciente del grado de idealización que  das y por supuesto, por qué y cómo lo das. Quiero tenerte  presente en mis días tristes y amargos  para que me levantes el ánimo aunque no pueda ver tu sonrisa, quiero decirte buenos días, gracias, lo siento, ¿cómo estás?, y desearte buenas noches al terminar el día aunque no tenga contestación por tu parte, quiero que me veas despeinada y desarreglada por las mañanas para no sentirme perfecta, quiero ponerte un café aunque se quede frío e inmóvil en el mismo sitio porque  nadie lo tome…quiero sentir que puedo olerte, oírte  y hasta que te puedo casi tocar. Quiero cuidarte y que me mimes, quiero empezar a quererte y que me enseñes a no olvidarte,  


Querido fantasma, quiero que te conviertas en lo más importante de mi vida durante la temporada que te alojes en mi casa y que el día que decidas irte note tu ausencia como si hubieras sido real.
Espero verte pronto por aquí. Mándame una señal cuando llegues.

¡¡¡¡¡¡RINNNNNNGGGGGGG !!!!!

(Vaya… ¿quién llamará a estas horas? Sea quién sea ¡qué inoportuno!)